Incendio acaba con el 80% de mercancía de una negociación de telas.
_ Recomendabe, revisar instalaciones eléctricas de establecimientos.

Probablemente, a causa de un sobrecalentamiento de la instalación eléctrica, se produjo un incendio de altas proporciones, en la madrugada del jueves 7 de enero, en conocida negociación de telas ubicada en Aldama 37 de esta ciudad de Acámbaro, acabando así con un 80 por ciento, aproximadamente, de dicho establecimiento.
El reporte del siniestro fue hecho a las 4:30 horas al heroico Cuerpo de Bomberos, comandado por el maestro Pedro Pablo Anaya, quien de inmediato se dirigió al lugar de los hechos y encabezó las operaciones de tres motobombas: dos por la calle Aldama y una más por la Privada Abasolo. Ante el avance del fuego y los accesos cerrados, hubo necesidad de romper un cristal para ingresar al inmueble por la calle Aldama, así como levantar las láminas del techo por la Privada Abasolo para tener el espacio suficiente para sofocar las llamas.
Fue hasta las 6:00 horas aproximadamente cuando los bomberos lograron apagar el fuego, prosiguiendo con maniobras complementarias hasta las 10:00 de la mañana, contando con el auxilio constante de Protección Civil, arrojándose en la operación alrededor de 60 Mil litros de agua.
Cabe mencionar que no hubo víctimas personales y justo es reconocer que en esta operación hubo total coordinación de las corporaciones participantes. Sin embargo, pudo observarse que los empleados y propietarios del negocio no tuvieron conocimiento del siniestro hasta la hora de apertura de la tienda, a las 9:00 de la mañana, además de que se comprobó que no contaba con el servicio de un velador y probablemente olvidaron en esa ocasión bajar el switch.
Por lo demás, se puso en grave riesgo a los vecinos, tanto de la calle Aldama como de la parte posterior, por la Privada Abasolo. Por todo lo cual es recomendable efectuar una revisión minuciosa de las instalaciones eléctricas, sobre todo del gran número de negociaciones que se han ido estableciendo en esa zona. Lo importante es prevenir no lamentar.